El daño que el celular le provoca a tu espalda

Como todos sabemos, vivimos en un mundo rodeado de tecnología, donde cualquier aparato que no tenga Facebook o Whatsapp ya pasó a la historia.

Desde que el hombre ha tenido la necesidad de desarrollar aparatos que faciliten su vida, también ha perjudicado muchos aspectos de esta misma.

Según un estudio reciente , publicado por el cirujano Kenneth H. Hansraj , con la inclinación de 60 grados  ejerces sobre la columna cervical una fuerza de 27 kilogramos , un daño el cuál los científicos han denominado el «cuello de whatsapp» , y que según expertos en traumatología, ortopedia y cirugía, podría ser uno de los nuevos males del siglo XXI.

La inspiración de este estudio, como lo menciona el Dr. Kenneth fue el hecho de que el notó , que  la mayoría de sus pacientes jóvenes que llegaban a consulta con dolor cervical , mantenían una posición anómala al usar el teléfono celular.

El estudio por su parte recoge datos sobre la posición de la cabeza y el cuello , así como el peso aplicado a la columna cervical.0011852946

Hablando de adultos, las cifras van desde los 12 kilos a 15 grados de inclinación hasta los 27 kilos de los 60 grados, pasando por los 30 grados/18 kilos y los 45 grados/22 kilos. “La gente se pasa al día una media de entre dos y cuatro horas con la cabeza inclinada, leyendo y escribiendo en sussmartphones y dispositivos, acumulado, esto es de 700 a 1.400 horas al año con estrés excesivo en las vertebras cervicales”. Advierte que “la pérdida de la curvatura natural incrementa el estrés en las cervicales y puede llevar a un desgaste prematuro, degeneración y posiblemente cirugías” y apunta que, en el caso de los adolescentes, esta cifra podría subir hasta las 5.000 horas.

Como podemos observar estos datos nos alertan a la comunidad médica, sobre todo , porque sabemos que la mayoría de personas actualmente usan el teléfono celular, por que inclusive ya se ha vuelto parte de nuestras vidas y de muchas personas , parte inclusive de sus empleos.

Por ello debemos de informar a nuestros pacientes el daño que puede provocar el uso de estos dispositivos , y proponer menor tiempo de uso.

Fuente:

Carlos Cabañas, el País.